La oscuridad llega cuando menos te lo esperas. De repente el mundo gira más rápido que tú y no lo puedes controlar. Y das tumbos… ninguno lleva un rumbo coherente. Tropiezas, te levantas y vuelves a tropezar. Gritas pero nadie te oye, solo tu interior. Lloras, pero nadie te consuela… Un hombro a veces no es suficiente. Son los golpes de la vida. Unos duelen más que otros. Te enseñan, te espabilan, te hacen rectificar. Te obligan a seguir el ritmo de la vida. A jugar en el mismo campo que el resto de los mortales. Ni tú eres las más importante ni la más mediocre. Eres una más. Puede que algún día seas la primordial para alguien. En ese momento te darás cuenta de que vuestros movimientos irán acompasados, sin crear desequilibrio. Es muy importante mantener esa balanza para que todo funcione. Y será en ese momento cuando la oscuridad se convierta en luz, los gritos en alegría y los llantos en sonrisas.sábado, 5 de marzo de 2011
En la oscuridad
La oscuridad llega cuando menos te lo esperas. De repente el mundo gira más rápido que tú y no lo puedes controlar. Y das tumbos… ninguno lleva un rumbo coherente. Tropiezas, te levantas y vuelves a tropezar. Gritas pero nadie te oye, solo tu interior. Lloras, pero nadie te consuela… Un hombro a veces no es suficiente. Son los golpes de la vida. Unos duelen más que otros. Te enseñan, te espabilan, te hacen rectificar. Te obligan a seguir el ritmo de la vida. A jugar en el mismo campo que el resto de los mortales. Ni tú eres las más importante ni la más mediocre. Eres una más. Puede que algún día seas la primordial para alguien. En ese momento te darás cuenta de que vuestros movimientos irán acompasados, sin crear desequilibrio. Es muy importante mantener esa balanza para que todo funcione. Y será en ese momento cuando la oscuridad se convierta en luz, los gritos en alegría y los llantos en sonrisas.
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5 curiosos ¿Te atreves a opinar?:
No algun día, es importante siempre, y puede que haya ocasiones en que esa persona haga que su presencia en ese momento, salve, alegre, comparta, sencillamente haga feliz a otra.
Las estrellas rasgan la oscuridad :)
Ongi etorri y otro grande para ti!
Emma, debo pensar que me conocés muy bien para haber escrito esto.
O será que nuestra condición de humanos nos asemeja?
Como sea, gracias por este texto.
Un beso
Me sorprendió mucho tu comentario, al parecer, pensé por un instante, que eras mi madre - sí, tiene tu mismo nombre-; pero luego la realidad (éste presente real) me mostró su cara verdadera. No obstante, revisé tu blog, y pues me he comprometido a revisarlo cautelosamente, y revisar es curiosearlo, leerlo y tener con qué comentar. Me gustó mucho esta entrada, y mientras la leía, tenía en mente, y de hecho creo que la estaba escuchando, esta canción:
http://www.youtube.com/watch?v=xm3kC4iYLRY
Tal vez aquélla hable más por mí en cuanto a la entrada. Sin embargo, dejaré colar algunas palabras: El mundo, en su proyección de sombras, aquella danza que parece no acabar; nos logra marear y es sólo gracias a un tercer brazo, que nos hale con fuerza, lograremos librarnos del desasosiego. Un tercer brazo que vaya conexo con una clavícula, que del con el esternón, y que éste refugie un corazón que te quiera y se haga querer. Ese encuentro de dos seres es la salvación tan anhelada.
No sé si ya la has escuchado. En fín, estaré en permanente contacto (en lo posible, procuraré) contigo y tu blog y me alegra por otra parte encontrar a alguien que disfrute de mis humildes líneas.
Un abrazo desde Bogotá,
Jess Vilardi.
P.d.: Perdón por explayarme.
Carlos Ese debería de ser el objetivo de cada uno de nosotros. Hacer feliz a la persona que tenemos al lado. Sería todo muy distinto.
Gracias por todo ;)
Patricia Los seres humanos, independientemente de nuestra procedencia, tenemos la capacidad de sentir lo mismo. Hay veces que un texto te llega al corazón por tu situación persona. Intuyo que vamos por el mismo camino! Gracias por leerme, es un halago ;)
Jess Vilardi Precioso tema, lo desconocía. Me encanta como b.s.o del texto. No te disculpes por explayarte, sólo faltaba! Gracias por leerme, escribirme y hacerme descubrir temas tan bonitos como el que acabas de hacer.
Muchos besos a todos. Es un placer recibir vuestros comentarios. Animáis a seguir escribiendo a cualquiera ;D
Por un momento creí que nos observabas. La vida es tal como la cuentas, como la leche, algo amarga, y nuestras parejas son los sobrecitos de azúcar. Afortunadamente yo tengo mi sobrecito, pues me encanta la leche.
Magnífico resumen.
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